miércoles, 29 de marzo de 2017

Los “camisas pardas” del separatismo


Ayer unos energúmenos asaltaron una sede del PP en Barcelona bajo la atenta mirada de la líder parlamentaria, Anna Gabriel, de la formación política que les da cobertura. Lo penoso de que un grupo antisistema, en este caso la CUP antes HB, asalte una sede de un partido político, en este caso el PP en otros también el PSOE, no es el hecho mismo sino el que estos individuos tengan representación parlamentaria, no renieguen de estos hechos, sino que los justifiquen y que el resto de sus socios, en este caso JxSi y ERC en otros PNV, no se desvinculen inmediatamente de los mismos condenándolos al ostracismo social y político.

Y penosos es que a estas horas los ciudadanos libres no hayan mostrado su solidaridad con quienes, piensen o no como ellos, se sienten agredidos por el mero hecho de defender sus ideas.

La razón de que ello ocurra hay que buscarla en la misma esencia del nacionalismo, la división maniquea entre los “nuestros” y los otros, para unos agua para los otros ajo.

Y qué decir de la justificación política, esa manifestación del respeto a las opiniones discordantes, ese debate sereno de ideas que refleja el lema “Referéndum si o si”. Todo un anuncio de lo que ha de venir si estos alcanzan su ideal totalitario, ríanse ustedes de las lentejas de las que se quejaba Maillo al referirse a las imposiciones de Ciudadanos al PP.

Si el debate no estuviera contaminado por la mentira, décadas de lavado de cerebros en escuelas y medios de comunicación, una bandera que denigran pues con ella solo pretenden esconder el expolio que han perpetrado en nombre de los paisos catalans, no tendría explicación el  que los ciudadanos que pueblan Barcelona, Lérida, Gerona y Tarragona no salieran de allí huyendo porque de ganar estos iluminados todos los días iban a ser en sus calles una triste repetición de la “noche de los cristales rotos”. Y si no saben de lo que hablo consulten Wikipedia.

miércoles, 15 de marzo de 2017

A Susana no le gusta gobernar

A Susana Díaz lo que de verdad le gusta es que la aplaudan como a Evita Perón, y eso le va a dificultar presidir el PSOE.

Viene esto a cuento del último disgusto que le estamos dando los andaluces a la Presidenta pues nos ha dado por protestar a cuenta del Impuesto de Sucesiones, el más caro e injusto de España, y esto le está deteriorando su imagen de maruja que tanto le gusta prodigar y de la que tan poco comparte.

A Susana no le gusta freírnos a impuestos, lo que de verdad le gusta es gastarse el dinero que le dan otros sin poner la cara para que se la rompan a ella. Y por eso le ha pedido a Montoro que se lleve el Impuesto de Sucesiones para Madrid, ¡ah! Pero eso si los dineros “paquí” porque si no ¿de dónde va a sacar para las verbenas con los mayores, los viajecitos y dar besos a troche y moche?

Y esta resistencia a decidir, en este caso suprimir o bajar impuestos, igual que su postura claudicante ante el conflicto de los estibadores, rebelan una persona incapaz de asumir los costos de decidir, tomar decisiones, gobernar lo que por otro lado explica cómo va Andalucía y plantea un panorama muy sombrío si alguna vez Susana Díaz llega a tener responsabilidades a nivel nacional.

No me gusta Pedro Sánchez, de Patxi López tengo la opinión de un oportunista que solo aspira a mantenerse en el sueldo público, pero ese triste panorama no me hace añorar liderazgos como los de Susana que pueden hacer que recordemos con nostalgia la etapa de Zapatero.

miércoles, 8 de marzo de 2017

El PP quiere que en el PSOE gane Pedro Sánchez


Si, las encuestas dirán que los votantes del PP prefieren a Susana Díaz http://www.elmundo.es/espana/2017/03/06/58bc5733ca47414a718b45a3.html , pero a quien de verdad quieren en el PP dirigiendo al PSOE es a Pedro Sánchez.

¿Y por qué? Porque así se reforzaría el PP y se hundiría el PSOE

1.- La victoria electoral la obtiene quien gana el centro. Un terreno que hasta hace poco se repartían PP y PSOE quedaría exclusivamente en manos del PP y Ciudadanos.

2.-La huida del votante de centro llevaría al PSOE a tercera, sino cuarta, fuerza política y haría matemáticamente imposible una alianza de izquierdas alternativa al PP.

3.-El liderazgo de la izquierda por Pablo Iglesias, Podemos, y el radicalismo de Pedro Sánchez en el PSOE harían imposible que Ciudadanos les diera su apoyo.

4.-La victoria de Pedro Sánchez abriría una guerra a muerte entre él y los barones del PSOE en Extremadura, Aragón, Asturias y Andalucía que provocaron su caída y con ello el PSOE se desangrara en guerras internas entre quien tiene el poder político y quien tiene el poder territorial.

5.-Esa guerra a muerte entre Sánchez y sus barones llevaría a una campaña electoral imposible en la que sus barones procurarían que se diera un nuevo batacazo.

6.- El propio Sánchez como candidato ha sido derrotado dos veces por Rajoy y no hay dos sin tres.

Así que está claro a quien, descartado  el bueno de Javier Fernández, prefiere el PP para  liderar el PSOE.

lunes, 6 de marzo de 2017

Cuando “Dimisión es dimisión” plantea más problemas que ventajas a Ciudadanos


Está visto que el que empieza exigiendo debe dejarse siempre una puerta abierta por la que poder recular a tiempo y no quedar en evidencia.

Y eso va camino de ocurrirle a Ciudadano por “un señor de Murcia” que es del PP.

Andaba últimamente Ciudadanos muy alicaído porque el PP no le tenía en cuenta para aprobar los Presupuestos ni asumía, razonadamente, la eliminación del aforamiento de Diputados y la limitación de mandatos del Presidente cuando vio la posibilidad de rehabilitar su imagen exigiendo la dimisión del Presidente de la Comunidad Autónoma de Murcia.

El tema tenia para Ciudadanos ventajas indudables

1.-Contaba con que un “plato menor” como es Murcia, para el caso una Comunidad un provincial, por lo que su presidente es lo que para Sevilla el presidente de la Diputación, no iba a poner en riesgo su alianza con el PP en España.

2.- Consecuencia de ello era que contaban con darle un escarmiento a Rajoy y al PP en la cabeza de alguien que podía ser “prescindible” pues, es importante el matiz, no buscaban tanto cargarse un gobierno del PP como “cobrarse un trofeo” que exhibir ante su electorado como “azote” del PP.

Pero la dirección de Ciudadanos debiera haber escarmentado en cabeza ajena y no tuvo en cuenta la resistencia de Rajoy lo que les está llevando a que lo que parecía un triunfo seguro empiece a hacer aguas por todos lados y le vaya a perjudicar más que a beneficiar.

Y ello porque

1.- Si finalmente el juez no imputa al Presidente de Murcia ¿Cómo sostendrá su petición de hacer dimitir a un inocente?

2.-Si dimite al fin ¿Cómo justificara que no exigiera lo mismo al consejero Arellano del gobierno socialista de Susana Díaz o al alcalde socialista de Granada que estuvo y está, respectivamente, en igual situación procesal que el popular murciano?

Y es que Rajoy, alumno aventajado de don Manuel Fraga Iribarne al que se le atribuye aquello de que “En España quien resiste gana”, sabe que el manejo del tiempo, su influencia en los medios y el aireamiento de las contradicciones de Ciudadanos acabaran por socavar la posición de estos y cualquier solución que se adopte, incluso la dimisión del presidente murciano, que él valora en tanto le reporte beneficios, solo perjudicara a Ciudadanos y enseñara a otros el costo de echarle un pulso.