Antes
que nada, los números. http://www.lavanguardia.com/vangdata/20150525/54431861684/votos-concejales-pierde-gana-cada-partido.html
En
las municipales de 2015, únicas de ámbito nacional, el PP ha logrado 6.032.496
votos y 22.750 concejales frente a los 5.587.084
votos y 20.824 del
PSOE.
Entre
ellos dos PP y PSOE suman 11.619.580 votos y 43.574 concejales de un total de 59.681
concejales. En porcentaje el PP + PSOE suman el 64,5 % de los votos y el 73% de
los concejales.
¿Ha
muerto el bipartidismo? Yo creo que no.
Y
se verá más claro cuando tengamos los datos de voto provincializados.
Una
vez que lo tengamos podremos realmente hacer un análisis de asignación de votos
y no esa patochada que han avanzado algunos periódicos que confunden la realidad con el deseo http://politica.elpais.com/politica/2015/05/25/actualidad/1432511335_649845.html
trasladando
directamente-y diría que sin aplicar la Ley D´hont sino el porcentaje- el número
de votos a escaños en el Congreso de los Diputados.
¿En
que perjudican los datos al PSOE?
No
es nuevo el frente antiPP que intenta utilizar el PSOE. La diferencia es que
ahora el PSOE ni va a ser el protagonista ni el más beneficiado.
Antes
el PSOE hacia estos pactos para quitarle alcaldías y gobiernos al PP y quedárselos
él. Ahora no siempre va a ser así y los casos más evidentes son las alcaldías
de Madrid y Barcelona que si no quiere que sean del PP lo tendrá que entregar a
la extrema izquierda de Podemos.
Y
es ahí donde vendrá su gran perdida. Automáticamente el PSOE dejara de ser el “partido
referente” de la izquierda que ha ostentado durante los 40 años de democracia.
La fragmentación de la izquierda y la pérdida de un liderazgo claro por el PSOE
llevaran a la fragmentación del voto y a una menor representación conjunta en
el Congreso de los Diputados.
¿En
que gana el PP?
Primero
es que mantiene el liderazgo como partido más votado.
Segundo,
se reafirma como referente del espacio de centro-derecha. Y a eso ha ayudado el
que el crecimiento de Ciudadanos ha sido menor al que ellos esperaban.
Y
ayudara la errática política de pactos de Ciudadanos a partir de ahora donde
por acción u omisión entregara gobiernos municipales o autonómicos a PSOE o PP.
A ver como lo explica.
Cierto
que podrá captar votos de la ya casi extinta UPyD pero me da en la nariz que perderá
más que ganara y solo podrá aspirar al papel de bisagra que en tiempos
ejercieron los nacionalismos vasco y catalán, y tan poco por durante mucho
tiempo.
En
conclusión, que o soy el último optimista, que puede ser, o al PP todavía le
queda partido y opciones de victoria en las próximas generales. Y ustedes que
lo vean.